Prestaciones laborales y salario mínimo en Italia: todo lo que debes saber

El proceso de contratación internacional puede resultar difícil, sobre todo cuando se entra en territorio desconocido. 

Los empleados muy cualificados tienen cada vez más oportunidades de trabajar a distancia en todo el mundo. Así pues, ofrecer prestaciones competitivas es primordial para las empresas que quieren captar y retener a los mejores talentos extranjeros.

Para quienes no tienen mucha experiencia en contratar y pagar a trabajadores remotos en el extranjero, puede resultar muy difícil estar al tanto de todo lo relacionado con las prestaciones reglamentarias y complementarias.Contratar en Italia, un país con una singular normativa laboral, tiene un extra de complejidad. 

En este artículo, hablamos de todo lo que hay que saber sobre el sistema laboral italiano, desde el salario mínimo hasta la gestión de las prestaciones para los empleados internacionales.

Nuestro objetivo es llevarte de la mano por el panorama laboral italiano para que puedas afrontar el proceso de contratación en Italia con seguridad, eficacia y facilidad.

Lo que debes saber antes de contratar en Italia

En primer lugar, veamos algunas características destacables de los sistemas de nóminas y prestaciones de los empleados de Italia:

• Es obligatorio que todas las empresas que trabajan con empleados de allí posean sus propias entidades jurídicas con sede en Italia para gestionar las nóminas, las prestaciones de los empleados, los impuestos y el cumplimiento normativo.

• La Constitución italiana, el código civil, los convenios laborales sectoriales y los contratos individuales se entrecruzan a la hora de gestionar las prestaciones de los trabajadores.

• Las empresas deben ofrecer un contrato individual a cada trabajador.

• Italia tiene sindicatos consolidados y políticas favorables para los trabajadores, a menudo regionales.

• El Gobierno italiano está especialmente centrado en corregir la clasificación de los trabajadores como empleados o trabajadores por cuenta propia. Aunque una clasificación errónea se produzca sin querer, las empresas se exponen a fuertes sanciones, que pueden incluir la pérdida de la propiedad intelectual.

• Los empleados italianos cobran al mes y suelen gozar de un «decimotercer mes» de salario, que se abona en diciembre. Dependiendo del sector y del contrato laboral, algunos también pueden tener derecho a un «decimocuarto mes» de paga el verano siguiente al año en cuestión.

• La excepcional red sanitaria pública italiana, el Servizio Sanitario Nazionale (SSN), garantiza una asistencia básica de calidad, pero ofrecer un seguro privado adicional proporciona a los empleados más opciones y flexibilidad.

• El complejo sistema que regula las prestaciones de los empleados en Italia, así como los elevados costes de financiación del seguro obligatorio y otras prestaciones del país, hacen que algunas empresas vean con buenos ojos colaborar con trabajadores por cuenta propia independientes. Para tomar esta y otras decisiones que afecten a la estructuración, una empresa debe asesorarse bien con gente del país.

¿Cuál es el salario mínimo en Italia?

No hay salario mínimo obligatorio en Italia. En su lugar, los distintos sectores del país establecen salarios mínimos para cada clasificación laboral, normalmente mediante convenios colectivos.

Este planteamiento permite a empresarios y sindicatos negociar y fijar normas salariales mínimas para adaptarlas a cada sector, cuyo salario mínimo depende de factores como las demandas específicas, los niveles de productividad y las condiciones económicas de cada uno. 

Aunque los convenios colectivos ofrecen más flexibilidad, también implican que los salarios mínimos pueden variar considerablemente de un sector a otro, por lo que puede producirse una brecha salarial en la remuneración de los trabajadores de cada sector. 

Sin embargo, esto puede cambiar relativamente pronto.

El actual Gobierno italiano es partidario de implantar un salario mínimo nacional y se ha presentado un proyecto de ley al Parlamento. Este posible cambio pretende establecer un salario mínimo único que se aplique a todos los sectores, de modo que todos los trabajadores de Italia dispongan de un marco retributivo justo. 

¿Cómo funcionan los convenios colectivos en Italia? 

Los convenios colectivos se negocian entre sindicatos y asociaciones empresariales para fijar las condiciones laborales. 

En general, un convenio colectivo regula lo siguiente:

• Aumentos salariales e inflación prevista.

• Cambios por parte de las empresas, como nuevos métodos de trabajo.

• Cuestiones no salariales (vacaciones, horarios, permisos y derechos de información).

Existen dos tipos de convenios colectivos: nacionales y regionales. Los nacionales establecen las normas mínimas del empleo en todo el país y comprenden a todos los trabajadores de un sector específico. Por su parte, los regionales o de empresa abordan detalles específicos, como las condiciones laborales, los contratos de trabajo y las primas. 

Los convenios colectivos desempeñan un papel fundamental a la hora de determinar los salarios y las condiciones laborales en Italia. Es importante que las empresas extranjeras que contraten a trabajadores italianos conozcan estos acuerdos, ya que así podrán evitar sanciones por incumplimiento. 

Convenios colectivos nacionales

Los convenios colectivos nacionales protegen a cerca del 95 % de los trabajadores en Italia.

Estos convenios establecen las normas mínimas de empleo a escala nacional para garantizar la cobertura de todos los trabajadores de un sector. Los salarios mínimos acordados en ellos se ajustan anualmente en función de la inflación, y se revisan y negocian cada tres años. 

Este marco garantiza actualizaciones periódicas y una representación justa de los trabajadores, ya que pretende aportar más estabilidad y coherencia a las condiciones laborales en el país.

Convenios colectivos regionales y de empresa

Estos tipos de convenios se centran en detalles más precisos, como las condiciones laborales, los contratos de trabajo, las normas de rendimiento, las primas y la antigüedad. 

Este enfoque descentralizado favorece acuerdos más adaptados a las necesidades específicas de cada región o empresa. Las primas y las normas de productividad suelen revisarse y acordarse todos los años. 

El objetivo de un convenio colectivo regional o de empresa es fijar un acuerdo transparente y que beneficie tanto a empresas como a trabajadores en un ámbito más localizado.

Comprender y negociar un convenio colectivo en Italia puede ser complicado, pero no tiene por qué.

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¿Cuál es el salario medio en Italia? 

Si quieres contratar en Italia y te preocupa la falta de legislación sobre salario mínimo, te interesará saber cuál es el salario medio y qué se considera aceptable.

A continuación, te mostramos cómo está el panorama salarial medio del país en general para que puedas tomar mejores decisiones.

Según el explorador de salarios, a fecha de marzo de 2023, el salario bruto medio en Italia es de 43 800 EUR al año o 3650 EUR al mes e incluye diversas prestaciones, como ayudas para el alojamiento, gastos de viaje y paga de vacaciones.

Sin contar todas las prestaciones, el salario medio es de 29 700 EUR al año o 2475 EUR al mes, según Statista.

Ten en cuenta que esta cifra es una media y no necesariamente refleja lo que tendrás que pagarles a los trabajadores que contrates en Italia. 

4 factores que afectan a los salarios italianos

Aunque el salario medio sirve como punto de referencia para determinar la retribución en Italia, hay varios factores que influyen en los salarios de Italia, y es esencial que tanto las empresas como las personas que buscan trabajo los comprendan para saber moverse por el mercado laboral italiano y negociar paquetes de remuneración justos.

1. Sector

Cada sector tiene sus niveles de demanda, requisitos de cualificación y rentabilidad. Todos estos factores influyen directamente en los rangos salariales. Por ejemplo, los sectores financiero y tecnológico suelen ofrecer salarios más altos que los sectores con márgenes de beneficio más bajos. 

Según el explorador de salarios, el salario mensual medio por sector en Italia es el siguiente:

• Sanidad: entre 2880 EUR y 8730 EUR.

• Jurídico: entre 2030 EUR y 7500 EUR.

• Contabilidad/finanzas: entre 1830 EUR y 7390 EUR.

• Informática: entre 2880 EUR y 6550 EUR.

• Ingeniería: entre 3390 EUR y 3860 EUR.

• Publicidad/diseño: entre 2170 EUR y 3730 EUR.

• Venta al por menor: entre 1410 EUR y 6670 EUR.

• Construcción: entre 1620 EUR y 6220 EUR.

• Hostelería: entre 1240 EUR y 6650 EUR.

• Automoción: entre 1410 EUR y 2630 EUR.

Conocer los rangos salariales del país te ayudará a calibrar mejor las expectativas salariales de los distintos sectores en Italia y a ofrecer salarios razonables al contratar allí. 

2. Nivel

Como en la mayoría de los países, en Italia se gana mucho más en los puestos directivos que en los de entrada. 

Según el explorador de salarios, la progresión salarial es la siguiente:

• Nivel júnior: del 3 al 5 %.

• Nivel intermedio: del 6 al 9 %.

• Nivel sénior: del 10 al 15 %.

• Nivel directivo: del 15 al 20 %.

Esta estadística muestra el gran potencial de crecimiento salarial a medida que los empleados ascienden en sus carreras profesionales en Italia. Asegúrate de tener en cuenta la progresión salarial a la hora de contratar a trabajadores italianos para garantizar una remuneración competitiva y oportunidades de ascenso.

3. Región

En Italia, la región puede influir de forma significativa en los salarios y el coste de la vida. 

El norte del país, caracterizado por un comercio próspero, una economía industrial y una infraestructura turística bien desarrollada, es más rico que el sur. De media, la renta y el coste de la vida en Milán, por ejemplo, casi duplican los de las ciudades del sur.

Y, aunque el coste de la vida es más bajo en el sur de Italia, hay tasas de desempleo más elevadas. Esta disparidad puede atribuirse a factores como un sector industrial menos desarrollado, escasas oportunidades de empleo y dificultades económicas. 

Comprender estas diferencias regionales es clave a la hora de abordar las estructuras salariales y los ajustes del coste de la vida para los empleados de Italia.

4. Género

A pesar de los avances en materia de igualdad, sigue habiendo una importante brecha salarial entre hombres y mujeres en Italia; de media, las mujeres ganan un 4,2 % menosque los hombres. 

Algunas de las razones que explican esta brecha son la segregación ocupacional, la desigualdad de oportunidades de ascenso profesional y la discriminación en el lugar de trabajo. 

Afortunadamente, se están realizando esfuerzos para mitigar este problema mediante el fomento de la transparencia salarial, la aplicación de la legislación sobre igualdad salarial y la creación de un entorno laboral más inclusivo para todo el mundo.

¿Quién tiene derecho a las diferentes prestaciones en Italia?

Conocer las prestaciones, las expectativas y los requisitos en Italia te ayudará a evitar riesgos caros, como la clasificación errónea de los empleados o las infracciones de los contratos laborales específicos del país. Cuanta más información tengas, mejor podrás ponderar la eficacia de tu programa de gestión de prestaciones.

Todos los ciudadanos italianos que trabajan en su país tienen derecho a recibir prestaciones y hay varios factores que determinan los tipos de prestaciones que les corresponden. Los requisitos específicos del sector son decisivos en este caso, pero los sindicatos italianos (que están muy activos) también desempeñan un papel clave, al igual que las características individuales de los empleados, como la edad, el sexo, el rango salarial, la antigüedad laboral y la ubicación.

Todos los ciudadanos y residentes legales en Italia tienen acceso automático al sistema sanitario del país. Dado que una asistencia médica gratuita o muy barata es una prestación obligatoria del sistema de bienestar social italiano, las empresas no están obligadas a ofrecer seguro médico. El sistema sanitario del país se financia, en gran parte, con impuestos, como el Impuesto Regional sobre Actividades Productivas (IRAP). Este impuesto sobre las empresas que operan en Italia se calcula en el ámbito regional y se recauda en el nacional.

Las cotizaciones al régimen de pensiones son obligatorias para empresarios y trabajadores, pero difieren en función del sector y el tipo de empleo.

Las empresas (no los trabajadores) también están obligados a mantener un seguro de accidentes laborales a través del Istituto Nazionale per l'Assicurazione contro gli Infortuni sul Lavoro (INAIL).

En Italia, los empleados tienen derecho a una baja por enfermedad retribuida: la empresa paga íntegramente los tres primeros días y el sistema nacional de salud sufraga el salario del empleado hasta 180 días. Un sólido impuesto de sociedades constituye la piedra angular financiera de este sistema.

En cuanto a los trabajadores por cuenta propia, en Italia solo pueden acceder a determinadas prestaciones estatales. Quedan excluidas las vacaciones remuneradas, la baja por enfermedad y el seguro de accidentes de trabajo, pero, gracias a la aplicación de la Ley de Empleo, pueden disfrutar de permisos parentales y subsidios de maternidad.

Prestaciones reglamentarias y comunes de los empleados

Las principales prestaciones reglamentarias y comunes de los trabajadores en Italia son las siguientes:

• Derecho a vacaciones y bajas.

• Permiso parental.

• Planes de pensiones y cotizaciones de jubilación.

• Pago de horas extras.

• Seguro.

• Prestaciones complementarias.

Vamos a repasar un poco cada una de ellas:

Derecho a vacaciones y bajas

Vacaciones

Cuatro semanas (20 días) de vacaciones remuneradas al año es el mínimo obligatorio para los empleados a tiempo completo en Italia. El empleador no puede sustituir estas cuatro semanas por una compensación económica. Dos de las cuatro semanas deben utilizarse en un año determinado, mientras que las otras dos pueden utilizarse en los 18 meses siguientes al final del año en el que se acumulan. En algunos sectores se pueden ofrecer vacaciones remuneradas más largas si el contrato lo estipula. Además, hay 12 días festivos al año en Italia.

Baja por enfermedad

Las bajas por enfermedad en Italia pueden ser muy complicadas, según el tipo de empleo y el contrato laboral. Lo normal es que los empleados perciban el 100 % de su salario por parte de la empresa durante los tres primeros días de baja; este porcentaje desciende al 66 % en caso de que sea la tercera baja por enfermedad ese año y al 50 % en caso de que sea la cuarta.

A partir del cuarto día de enfermedad, los empleados suelen percibir un porcentaje de su salario del organismo italiano de seguridad social, el Istituto Nazionale della Previdenza Sociale (INPS), y un porcentaje de la empresa, hasta un máximo de 180 días de enfermedad remunerados al año. En la práctica, esto equivale a un salario completo o casi.

Baja de maternidad y paternidad

Las empleadas reciben una baja de maternidad remunerada obligatoria de cinco meses, normalmente dos antes del parto y tres después.

Durante la baja, las trabajadoras perciben el 80 % de su salario normal por parte del INPS a través de la empresa, que suele compensar la diferencia. Los padres adoptivos tienen derecho a los mismos cinco meses de permiso retribuido.

Además, Italia concede 10 días de baja de paternidad, remunerados al 100 %, que deben cogerse en los cinco meses siguientes al nacimiento. La baja de paternidad puede ampliarse en caso de ausencia o incapacidad de la madre.

En los primeros años de vida de su hijo, ambos progenitores pueden disfrutar conjuntamente de hasta 10 meses de permiso parental, gran parte de los cuales suelen pagarse peor o no remunerarse.

En la próxima legislación, estas prestaciones serán aún más generosas, con bajas de paternidad más largas y más tiempo libre remunerado para reuniones relacionadas con la educación de los hijos.

Planes de pensiones y cotizaciones de jubilación

Italia ajusta con frecuencia los requisitos de las pensiones a su esperanza media de vida, que es de las más altas del mundo. Las pensiones se conceden a quienes cumplen los requisitos de edad y cotización mínima. 

La edad mínima actual está fijada en 67 años, tanto para hombres como para mujeres, y se espera que se mantenga así hasta 2026 al menos. Se exige un mínimo de 20 años de cotización al sistema para tener derecho a la prestación de jubilación.

Para poder acceder a la jubilación anticipada y a la pensión pública en Italia, las mujeres tienen que haber cotizado un mínimo de 41 años y 10 meses, y los hombres 42 años y 10 meses.

Los trabajadores que no reúnan los requisitos para percibir una pensión completa pueden optar a una prestación de asistencia social a la vejez, conocida como assegno sociale. Pueden acceder a ella las personas de 67 años en adelante que hayan vivido en Italia durante un mínimo de 10 años.

Por lo general, las empresas deben cotizar al plan de pensiones el equivalente al 33 % del salario del trabajador, mientras que la mayoría de los empleados aportan algo más del 9 % de su sueldo. La empresa retiene al trabajador la parte correspondiente de su nómina y realiza todas estas contribuciones directamente.

Pago de horas extras

En general, la semana laboral en Italia es de 40 horas y la jornada laboral estándar es de 8 horas. El número máximo de horas que se puede trabajar por encima de la jornada estándar la determinan los contratos laborales y los convenios colectivos, y todas las horas extraordinarias deben pagarse.

Seguro

En Italia, los empleadores están obligados a pagar para asegurar a sus empleados contra accidentes, lesiones y enfermedades relacionadas con el trabajo. El INAIL gestiona todas estas pólizas de seguro y paga las reclamaciones.

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Prestaciones complementarias para los trabajadores italianos

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En Italia, muchos de los mejores empleados de nivel ejecutivo buscan paquetes de prestaciones que incluyan:

• Opciones sobre acciones y participación en beneficios (no las esperan, pero las valoran mucho).

• Seguro de vida y accidentes complementario.

• Planes de jubilación complementarios.

• Planes de seguro médico complementarios, que pueden ser especialmente atractivos, ya que ofrecen mayor flexibilidad y comodidad que el programa público italiano, que ya es generoso de por sí.

En Italia, los empleados de todos los niveles buscan prestaciones de este estilo, así como otras que afectan a los valores y el estilo de vida, por ejemplo:

• Horarios flexibles o asíncronos (prioridad importante para los trabajadores del conocimiento italianos).

• Ayuda al desarrollo profesional.

• Ayuda a la oficina en casa.

• Ayuda a los espacios y opciones de coworking.

• Apoyo a la salud mental y el bienestar personal.

El estudio sobre el futuro de las prestaciones modernas de Remote te ofrece una visión completa de las prestaciones que más valoran los mejores trabajadores remotos internacionales.

Cómo fijar y gestionar prestaciones para empleados internacionales

Gestionar las prestaciones de los empleados internacionales exige conocer las estructuras de prestaciones existentes en un país y ofrecer prestaciones complementarias atractivas y rentables. En un país como Italia, es necesario estar siempre muy pendiente de la letra pequeña de los contratos laborales individuales y específicos de un sector para cumplir las normativas regionales, nacionales y europeas, ya que son muy complejas y requieren conocimientos especializados localizados.

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(Fuente de la imagen)

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• Ajustarte a la normativa de las prestaciones obligatorias en el país.

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• Desarrollar paquetes de remuneración justos y competitivos.

• Crear contratos de trabajo conforme a la legalidad.

• Gestionar la salida de los empleados de conformidad con la legislación local.

Sabemos lo que exigen los organismos italianos y lo que quieren los empleados con talento. Por eso, podemos simplificarte todo el proceso de contratación, integración, gestión de nóminas, fiscalidad, cumplimiento normativo y prestaciones, al tiempo que te ayudamos a evitar errores caros.

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Es fácil gestionar un sistema de prestaciones italiano competitivo

Gestionar bien las nóminas y las prestaciones para retener a los mejores talentos en Italia es especialmente complejo y difícil. Hace falta un conocimiento local mucho más profundo, recursos logísticos y estar al día de absolutamente todo, algo factible para la mayoría de empresas extranjeras; hasta el más mínimo error puede acarrear importantes consecuencias jurídicas y financieras.

Una gestión satisfactoria de las prestaciones de los empleados en Italia depende de dos factores:

• El cumplimiento preciso de la normativa nacional y local, y de los contratos que rigen el sistema de prestaciones reglamentarias del país.

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