Consejos para entrevistas a distancia: 6 tácticas para que una entrevista de trabajo vaya bien

Has presentado una solicitud excelente y has conseguido una entrevista para un nuevo trabajo apasionante. Aunque tengas ganas de tu primera conversación a través de Zoom, puede que te intimide un poco presentarte bien en una entrevista virtual.

Las entrevistas a distancia se han convertido en moneda corriente, incluso en situaciones en las que el propio puesto de trabajo es presencial o híbrido. Muchos empleadores y responsables de contratación prefieren realizar las primeras entrevistas de forma virtual para ahorrarse tiempo y molestias. Si quieres un puesto totalmente remoto, debes saber comunicarte en una entrevista a distancia para demostrar que puedes trabajar bien con los miembros de tu equipo remoto en el mismo contexto.

Hoy en día, es más importante que nunca saber cómo superar una entrevista a distancia. El equipo de contratación interno de Remote ha redactado seis consejos para una entrevista de trabajo a fin de aumentar tus posibilidades y ayudarte a conseguir el trabajo a distancia de tus sueños.

1. Practica con la tecnología que utiliza quien te entreviste

Aunque muchos aspectos del proceso de entrevista son los mismos, ya sea en persona o virtualmente, hay algunos exclusivos de las entrevistas a distancia que pueden ponerte en un aprieto.

Anastasia Pshegodskaya, responsable sénior de contratación en Remote, explica por qué las entrevistas a distancia pueden resultar más estresantes para los candidatos y hacer que flaqueen:

«Cuando la entrevista es por Zoom, no solo te preocupan tus respuestas, sino también la posible inestabilidad en lo que respecta a la tecnología: tienes que conectarte a la hora, puede que te preocupe que tu conexión a Internet no sea buena y, a veces, hasta necesitas utilizar herramientas que quizá no hayas usado nunca».

Para que la ansiedad no se apodere de ti, familiarízate con antelación con todas las herramientas que necesitarás para la entrevista. Scott Entwistle, encargado de la contratación en Remote, sugiere que hagas una prueba unos diez minutos antes de la llamada para asegurarte de que tienes tiempo de resolver cualquier problema técnico:

«Siempre recomiendo hacer una prueba antes de una entrevista. Las plataformas de vídeo como Zoom, Whereby, Teams y Google Meet tienen sus peculiaridades, por lo que la mejor manera de probarlas es invitar a un amigo (o incluso a ti mismo en otro dispositivo) para asegurarte de que puedes unirte a una reunión sin problemas. No te limites a comprobar tu conexión. Asegúrate de que la cámara y el micrófono funcionan para evitar estresarte aún más en la llamada».

Es posible que la persona que te entreviste te pida que utilices otras herramientas, como pizarras virtuales para una tarea, o que compartas una presentación que hayas preparado para el puesto. Lee atentamente las instrucciones de la entrevista y, si hace falta, haz preguntas para poder practicar y prepararte bien para lo que se te pida en el aspecto técnico.

Si te preocupa tu conexión a Internet, haz una videollamada de prueba con un amigo o familiar en la misma sala en la que harás la entrevista (¡incluso puedes hacer una entrevista de práctica con ellos!). Otra opción es buscar un lugar público tranquilo y con buena conexión wifi, como una biblioteca, una cafetería o el vestíbulo de un hotel.

Recuerda que, con todo, es posible que tengas algún problema durante la entrevista, pero, si te preparas en condiciones, te sentirás con mucha más seguridad y confianza.

Si tienes problemas el día de la entrevista, propón continuar sin la cámara. Así, consumes menos ancho de banda y facilitas que tu dispositivo y tu conexión a Internet aguanten mejor la entrevista. Si la tecnología se niega a colaborar, pide reprogramar la entrevista para otro momento.

Pase lo que pase, mantén la calma y la compostura: recuerda que, sea como sea, este tipo de problemas van a ser una constante en un puesto totalmente remoto.

2. Que el atuendo y el fondo hablen bien de ti

Antes de la entrevista, piensa en tu atuendo y en el entorno. Puede parecer un poco ridículo presentarse a una entrevista de Zoom desde el salón de tu casa en traje, pero es importante que la elección de la ropa y el lugar transmita profesionalidad.

Una camisa con botones puede transmitir que los negocios son lo tuyo. Un top con un estampado interesante puede ayudarte a expresar creatividad o dinamismo. Un jersey de punto arreglado o una camisa de algodón bonita demostrarán que le has dado vueltas a tu aspecto de cara a la entrevista a distancia. Recuerda que la persona que te entrevista espera profesionalidad aunque no estés en una oficina física.

Los empleos en sectores más tradicionales, como las finanzas o el derecho, pueden requerir una planificación más meditada. Si no tienes claro cómo vestir, no está de más preguntar. Pregúntale a la persona encargada de la contratación por correo electrónico antes de la entrevista. Ese tipo de preguntas demuestran que prestas atención a los detalles y que te comprometes con el puesto.

Tampoco debes descuidar el fondo. Lo mejor suele ser un fondo limpio, como tener una pared detrás y una buena luz natural. Como dice Scott, los entrevistadores no esperan que tengas toda una oficina equipadísima en casa, pero sí quieren ver que puedes pasar de vivir en casa a trabajar desde casa.

«Comprueba el entorno: si no es el deseable, siempre puedes utilizar un fondo artificial para facilitar las cosas».

3. Investiga sobre la empresa y su cultura

Una de las mejores cosas que puedes hacer antes de cualquier entrevista de trabajo es investigar por tu cuenta. Empieza por lo siguiente y ve centrándote en cuestiones más específicas que te ayuden a responder a preguntas relacionadas con la descripción del puesto:

• Terminología nueva de la descripción.

• Información general sobre la empresa.

• Valores, misión y visión de la marca.

• Panorama competitivo.

¿Quieres saber cómo acelerar la investigación? Yasmine Gray, cazatalentos en Remote, da algunos consejos útiles:

«Busca el sitio web de la empresa y asegúrate de que entiendes lo que hacen y por qué consideran que es importante. Busca contenido pertinente en su página de empleo o, si es público, en su manual. Apúntate cosas sobre lo bien que encajas con sus valores y lo que crees que puedes aportar al equipo».

Gaby Suarez, técnica sénior de contratación en Remote, recomienda a los candidatos que encuentren todo lo que puedan sobre la empresa, tanto en su sitio web como en fuentes externas.

«Investiga a la persona que te entrevista, la cultura de la empresa, a los fundadores y la financiación. Infórmate sobre los inversores. Asegúrate de conocer el tamaño de la empresa y entérate de lo rápido que crecen».

La información es poder, así que contar con todos estos datos te ayudará a demostrar el valor que puedes aportar a la empresa. El beneficio es doble: tus respuestas (y las preguntas que plantees) serán relevantes, lo que demostrará que conoces la empresa y tu posible función en ella, pero también destacarás y podrás demostrar tu dedicación y previsión. Quien te entreviste se dará cuenta de que el puesto en cuestión te interesa de verdad.

¡Consejo extra!

Busca información sobre la empresa en webs como Crunchbase, Glassdoor, Comparably y otros sitios de opiniones similares para saber mejor cómo funciona la empresa y cómo es la experiencia de los empleados. Esto es importante para que tú te hagas una idea de si encajas bien en la cultura de la empresa.

4. Practica las respuestas a las preguntas de la entrevista

Los mejores candidatos acuden a las entrevistas de trabajo preparados y transmiten sinceridad y seguridad.

Es importante que sepas qué tipo de preguntas te pueden hacer en la entrevista. Las preguntas técnicas ponen a prueba tus conocimientos y aptitudes, y en las de comportamiento te piden que expliques cómo has afrontado diferentes situaciones.

He aquí algunas preguntas habituales en las entrevistas a distancia:

• ¿Por qué quieres trabajar en esta empresa?

• ¿Qué aspectos de la descripción del puesto te han llevado a solicitarlo?

• ¿Qué experiencia previa tienes que te beneficie en este puesto?

• ¿Cuál es tu mayor punto fuerte?

• ¿Qué te motiva?

• ¿Cuáles son tus objetivos profesionales a medio o largo plazo?

• ¿Cómo gestionas la presión?

• ¿Cómo te tomas los comentarios constructivos?

¡Consejo extra!

Cuando respondas a preguntas sobre tus mayores retos y puntos débiles en la entrevista de trabajo, habla también de las medidas que has tomado o estás tomando actualmente para solucionar esos problemas, ya que demuestra autoconciencia y la persona que te entrevista se queda con una visión positiva de esos rasgos que, en otro caso, serían negativos.

Preguntas abstractas

Algunos entrevistadores te harán preguntas más abstractas para conocer tus prioridades u observar tu capacidad para resolver problemas en tiempo real. Esta información les permite conocerte de un modo que ayuda a suplir la distancia propia de una reunión virtual.

Algunas de estas preguntas abstractas podrían ser las siguientes:

• ¿Qué es mejor, entregar a tiempo un proyecto que no esté perfecto del todo o entregarlo con retraso pero que esté perfecto?

• ¿Qué era lo que menos te gustaba de tu anterior trabajo?

• ¿De qué logro tuyo te enorgulleces más?

• ¿Cómo defines el éxito?

• ¿Cómo gestionas los conflictos con un compañero, responsable o jefe?

• ¿Qué te apasiona?

Es importante que sepas qué responder a esas preguntas y que, además, suenen naturales. No te limites a decir lo que crees que quieren que digas: identifica tus motivaciones fundamentales y sincérate con quien te esté entrevistando.

Adelántate a ese tipo de preguntas y practica cómo responderlas de forma descriptiva pero concisa. Recuerda que practicar tus respuestas no consiste en crear un guion y memorizarlo, sino en aprender a expresar lo que piensas y sientes con palabras precisas y significativas.

5. Haz buenas migas con la persona que te entreviste

Aunque una entrevista por videollamada no es la forma más convencional de presentarse, eso no significa que no pueda haber buena conexión con la persona que está al otro lado de la pantalla. Gaby defiende a ultranza intentar tirar de habilidades comunicativas para conectar:

«La experiencia me dice que las habilidades interpersonales y el lenguaje corporal pueden evaluarse prácticamente igual que en una entrevista tradicional».

Es importante mantener una actitud amistosa y abierta, así como comunicar tu interés a lo largo de la conversación, ya que así puedes dejar más huella en la persona responsable de la contratación de lo que muchos candidatos creen. Scott se basa en estos indicios para evaluar la adecuación cultural de los candidatos remotos:

«Lo que más valoramos en Remote es la amabilidad, así que lo que más me entusiasma de un candidato es ver que le encanta nuestra misión, que tiene las aptitudes adecuadas para desempeñar bien el cargo y, en definitiva, que es una persona amable y abierta».

Si tienes nervios, no te preocupes: es normal, sobre todo si no sueles hacer entrevistas a distancia. Y, por mucho que suelas hacerlas, no dejan de ser una experiencia que muy pocos candidatos dominan. Intenta ver el vaso medio lleno y pensar que las cosas van bien, aunque creas que has cometido un error o has dicho algo que no te ha gustado.

Permítete mantener una conversación genuina; escucha, contesta, interactúa con la otra persona y sé tú. A poder ser, haz por generar un vínculo cercano. Puedes intentar empezar la conversación hablando de cosas personales, como dónde vives, cuáles son tus aficiones o intereses, e incluso preguntarle al entrevistador qué tal el día, el fin de semana o la jornada de trabajo remoto.

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6. Prepara preguntas y toma notas sobre la marcha

Aunque te estén entrevistando a ti, también es una oportunidad para que hagas preguntas tú, ya que, si haces las preguntas adecuadas, quien te entreviste verá que el puesto te interesa de verdad.

Anastasia considera que las preguntas que hacen los posibles candidatos son una muestra fundamental de sus capacidades analíticas y su inteligencia en relación con el puesto.

«Es bueno preparar las preguntas de antemano. Cuando entrevisto a los candidatos, una de las partes más importantes para mí es ver qué tipo de preguntas hacen, ya que demuestra cuánto se han preparado para la entrevista. Las preguntas interesantes relacionadas específicamente con la empresa ayudan a los candidatos a destacar frente a los demás».

No creas que no puedes tomar notas, consultarlas o apuntar otros temas de conversación sobre la marcha. Yasmine insta a los candidatos a llevar notas a la entrevista y lo considera un signo de preparación y un indicio de buenas dotes organizativas:

«Que tampoco parezca que estás leyendo todo el rato, pero, si echas un vistazo a las notas de vez en cuando, quienes se encargan de la contratación se dan cuenta y les gusta», explica. «Y ten cuidado con las preguntas que haces: cuanto más fácil sea encontrar la respuesta en Internet, más tiempo pierdes y menos parece que te has preparado».

Te dejamos algunas preguntas que podrías hacerle al entrevistador:

• ¿Qué es lo que más te gusta de trabajar en esta empresa?

• ¿Qué es lo mejor de este puesto?

• ¿Qué hace la empresa para fomentar el buen ambiente y la colaboración del equipo remoto?

• ¿La empresa pretende alcanzar objetivos específicos en los próximos cinco años?

• ¿Este puesto me obliga a firmar una cláusula de no competencia?

• ¿Te genera alguna duda mi idoneidad para este puesto?

• ¿Cómo es la fase de formación para este puesto y cuánto durará?

• ¿A quién voy a tener por arriba y por debajo?

A medida que vas haciendo preguntas, te haces una idea de cómo será tu vida cotidiana si consigues el puesto, conoces la empresa a través de alguien que ya trabaja en ella y evalúas cómo encajan tus objetivos y valores personales con los de la empresa.

Aprovecha ese momento para aclarar cualquier duda o malentendido que haya podido surgir durante la entrevista. Por último, agradécele al entrevistador su valioso tiempo y la oportunidad que te ha brindado.

Qué hacer después de la entrevista

Bueno, pues ya está hecha la entrevista. ¿Y ahora?

Relájate y date tiempo para descansar. Esto es lo que aconseja Yasmine a cualquier candidato para lidiar con la carga mental que supone la entrevista:

«Respira y haz algo que te guste: tómate un café, échate una partida a tu videojuego favorito, date un paseo o un baño calentito... Lo que sea que te haga sentir bien. Ten en cuenta que ningún equipo mínimamente razonable espera la perfección, sino a un ser humano real que pueda aportar valor a su equipo, y seguramente pase por alto cualquier contratiempo que tú hayas podido percibir, así que no te preocupes por esas cosas e intenta quitarte la entrevista de la cabeza».

Si no has recibido respuesta al cabo de unos días, igual puedes enviarle un mensaje a la persona responsable de la contratación para que te tenga en cuenta. Scott dice que esto es totalmente aceptable e indica tu entusiasmo:

«No hay nada malo en enviar un correo electrónico para agradecerle a alguien su tiempo. Una buena estrategia es una simple solicitud de conexión en LinkedIn después de la entrevista y un correo de seguimiento tres o cuatro días después para transmitir tus ganas de seguir adelante».

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